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MIS 5 MEJORES TRUCOS PARA NO ENGORDAR EN NAVIDAD

(¿Prefieres ver este post en vídeo? Pincha aquí)

En aquellas épocas en las que estaba en guerra con mi peso (y han sido muchas a lo largo de mi vida) la llegada de la Navidad suponía una pesadilla.

Hubiera querido dormirme al comenzar, y despertarme pasados Reyes para no tener que tirar de toda mi fuerza de voluntad al enfrentarme a las mesas llenas de deliciosos manjares (imposibles de evitar) allí por donde iba. Y al inevitable aumento de peso.

3kg. con suerte! y hasta 5 en algunas ocasiones. Sólo de pensarlo ya me sentía culpable sin haber empezado a comer; y comenzaba a imaginar los “castigos” a los que me iba a someter después.

Claro que, dormir todas las Navidades, supondría perderme también la diversión y el placer de compartir tiempo con mi familia.

Hubiera sido estupendo dormir y ¡soñar! 

Soñar que disfrutaba de las risas, de las confidencias, de los regalos y del cariño sin pasar por las comilonas.

Pero lo realmente genial hubiera sido estar despierta, ¡y crear las Navidades de mis sueños!

Y, ¿por qué no?

Así es cómo nacieron estos 5 trucos que hoy te comparto, y que nada tienen que ver con los tan sabidos (y poco practicados) no comer y beber en exceso, practicar deporte, o compensar comiendo menos los días “no clave”. 

Aquí van mis 5 trucos para vivir unas Navidades de ensueño.

1.- Regala(te) salud: la Navidad es tiempo de regalos. Nos volvemos locos buscando el regalo perfecto para nuestros seres queridos, olvidando que una de las cosas que todos más deseamos es tener una buena salud

Y, sin embargo, en estas fechas, atentamos continuamente contra ella.

¿Qué tal si este año cuidas de que todo lo que pongas en tu mesa sea delicioso y saludable?

Como bien dice Laura Iéronimo, nuestra nutricionista, “Siempre hay una alternativa más saludable a aquello que quieres comer, y que no lo es”.

¿Cómo hacerlo?

Usa ingredientes con menos carga calórica o más saludables (como AOVE en lugar de mantequilla; o harinas integrales en lugar de blancas); busca una preparación alternativa a tus platos tradicionales (como hacerlos al horno en lugar de fritos), o aumenta la densidad calórica del plato que deseas comer (añadiendo una ensalada o verduras) para reducir la cantidad que comes de la parte más calórica.

Si te faltan ideas, pincha aquí para descargarte mi recetario “Pecar sin Engordar en Navidad”.

Y si vas invitada a comer o cenar, elige siempre a tu favor. Las mesas en estos días están repletas de comida; seguro que, aun siendo selectiva con lo que comes y con las cantidades que comes, te quedarás saciada y feliz.

 

2.- Comparte Amor: La Navidad es tiempo de reuniones y de compartir. Reunirnos alrededor de la mesa nos permite compartir el placer de una buena conversación, de sentirnos cerca de nuestros seres queridos, de reír, de contar viejas anécdotas y de crear nuevas historias.

Y nada de esto depende de lo que hay en el plato! Podrías hacerlo incluso bebiendo sólo una infusión caliente, o estando todos reunidos alrededor de un buen fuego, sin nada que comer o beber.

Esto demuestra que la comida no es la protagonista de las Navidades.

De hecho, poner tu atención en tanta comida te distrae de lo importante: las personas a las que quieres

Elige de antemano qué quieres comer y cuánto; ponlo en tu plato y … dirige tu atención, Amor y tiempo a aquellos con los que compartes la mesa.

 

3.- Disfruta la compañía: ¿Y si, como parte del plan de estas navidades, en lugar de pasar horas y horas en la cocina, preparas una jornada de chicas (para realizar vuestra actividad favorita), una sesión de Spa familiar, una caminata por la montaña o paseo por la playa, una excursión a un lugar que no conozcas, juegos de sala o de mesa, una ruta de belenes, …?

Sin duda, uno de los mejores regalos que puedes hacer(te) estas Navidades es compartir tiempo de calidad con amigos y familiares; ese que tanto echas en falta en tu ajetreado día a día.

Y poner el foco en actividades que te proporcionan disfrute y diversión resta peso al placer que proporciona la comida en sí misma. Un placer que es tan instantáneo que, para mantenerlo en el tiempo, te obliga a comer y seguir comiendo.

¡Tampoco olvides dedicarte un momento a ti misma cada día!

 

4.- Ilusiónate, celebra la vida: hablamos a menudo de la “ilusión” o la “magia” de la Navidad: luces, villancicos, regalos, encuentros con familiares y de amigos, el gordo de la lotería … te deslumbran, te arrastran y te hacen olvidar que la verdadera magia está dentro de ti. 

¡Para!

Tómate un momento para apreciar todos tus logros de este año; todos tus aprendizajes, todas tus caídas y vueltas a levantar; todo el camino que ya has recorrido y el que te queda por recorrer. Todas las cualidades que tienes para dar a los demás y que te hacen única y valiosa. Eres merecedora de todo lo bueno que la vida tiene reservado para ti. 

Y festéjalos de la mejor manera: ¡cuidando tu cuerpo, tus pensamientos y tus emociones!

Porque la Navidad llegará y pasará, pero tu camino, tu vida continúa.

Por eso … 

 

5.- Sueña con tu futuro: Cierra los ojos y sueña con la mujer que quieres ser la semana que viene, el mes que viene, el año que viene por estas fechas …

Y pregúntate: ¿Para qué quiero cuidarme y no hacer excesos estas Navidades? ¿Qué es lo que quiero conseguir con ello? ¿Qué es lo que quiero evitar con ello?  ¿Cuánto lo quiero? ¿Cómo me sentiré cuándo lo haya conseguido?

Quizás descubras que engordar estas Navidades no tiene tanta importancia para ti. Y eso está bien, porque te permitirá tomar conciencia de que, en este momento, cuidarte NO es tu prioridad. Y asumirás las consecuencias de ello como responsabilidad tuya que son.

Sin embargo, si descubres que esto sí es IMPORTANTE PARA TI, conecta con tu motivación y comienza HOY dando los pasos adecuados para llegar a ser esa mujer que sueñas.

 

Te deseo una muy FELIZ NAVIDAD.

 

 

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